Muy Buenas a todos !! Pues si ! Nos vamos de Expedición a Perú !!
Tras un año de movidas haciendo planes intentando buscar una alternativa a Alpes, todo parecía indicar que nos marchábamos al Himalaya. Por cuestiones que se nos escapan, al final decidimos ir a los Andes. Varias razones, nuestra intención es la de buscar montañas solitarias, alejadas de las grandes masas expedicionarias arrastrando sus cuerpos casi inanimados por cuerdas fijas 😉 Tampoco nos queríamos arriesgar a que nos pegaran una paliza como a los amigos del Everest.. 😉 Así que por fechas sobre todo, decidimos volver, en mi caso, a la Cordillera Blanca en los Andes Peruanos.
Parece que todo está listo: billetes, vacunas, botiquín, material, comida de altura, logística, etc..
El plan que tenemos por ese hemisferio es bastante guapo. Por un lado tenemos un pico facil de aclimatación, en teoría el Urus, con unos 5.500m. De allí regresaremos a Huaraz para preparar la salida al Yanapaccha (5.490m) que por su no demasiada altura y terreno técnico (sobre todo su cima) será perfecto para nuestra aclimatación y futuro objetivo.
Nuestro siguiente plato será el espectacular y precioso Chopicalqui (6.354m). Para esta montaña utilizaremos campo base por primera vez, pues los otros dos iremos «con lo puesto» 😉
Se trata de una montaña que requiere de un par de campos de altura situados a 4.800m y 5.600m por terreno técnico glacial. Desde el último campo se accede a un collado que nos deja en la espectacular Arista Sudoeste y de ahí al famoso «hongo» cimero.
Tras la bajada al CB, nos iremos de nuevo a Huaraz a reponer fuerzas para nuestro último y gran objetivo, el Huascarán (6.768m).
Se trata de una montaña plagada de riesgos objetivos y en la que aún no tenemos claro si seguiremos la ruta normal de la Candeletta o la Ruta del Escudo. Para ello, partiremos de Musho hasta el CB, donde descansaremos un par de días. De allí subiremos al C1 a 5.400 y luego al C2 6.000m. Una larga noche de escalada, y si todo va bien nos dejará sobre su majestuosa cima.